Colegio

Propuesta Pedagógica: Biodiversidad del Entorno Escolar con el Componente de la Tradición Socio-cultural Sanjuanera.

Docente encargada: Daniana Barrios Castellar     Grado: 3°

Supervisión: Betty Sánchez Serrano

Participantes: Estudiantes de Preescolar y Básica Primaria

“Juguemos a buscar nuestra identidad”

“Juguemos a buscar nuestra identidad”, es una estrategia incluida dentro de una gran propuesta pedagógica  que tiene como eje central propiciar el aprendizaje significativo en niños y niñas a través de experiencias vivenciales, partiendo de una cultura nacional llevada a la cultura institucional, contribuyendo en gran manera a orientar los procesos pedagógicos que se tejen en las aulas de clases.

Sin embargo, todo este proceso debe ser continuo y complementario a los contenidos que se desarrollan en las aulas de clases, es decir, convertir esos lugares en espacios de aprendizaje; pues es desde allí que surgen necesidades, éstas se transforman en interrogantes dirigidos a una razón idónea: aprender y aprender haciendo en diferentes contextos.

Los interrogantes que dieron cabida a facilitar este interés fue una pregunta global: ¿Cómo adquiero mi identidad?, la cual dio paso a las siguientes subpreguntas:

·         ¿Por qué tenemos un nombre?

·         ¿Por qué nos diferenciamos a través de un nombre?

·         ¿Los niños y las niñas tenemos los mismos derechos y deberes?

·         ¿Quiénes se encargan de dar por hecho nuestra identidad?

·         ¿Qué es un documento de identidad?

Para dar respuestas a estos interrogantes se plantearon una serie de actividades encaminadas a dar cuenta de los conocimientos previos de los estudiantes y contrastados con la realidad que los circunda, todas con carácter significativo, estimulando en niños y niñas lo mejor de sí mismos, a partir de un enriquecimiento potencial, personal y social.

Actividades como: “Dejo mi huellita en el mundo”, “Conociendo mi notaria”, “En los zapatos de mi registrador”, “Ciudadano estudiantil”, “Soy libre…yo elijo”; apuntaron a fortalecer las capacidades de los niños y niñas, brindándoles herramientas prácticas que conllevaran al compromiso de rescatar y fortalecer, por una necesidad su identidad, mediante un documento que los identificara (Registro Civil de Nacimiento- Tarjeta de identidad) en la incesante búsqueda una cultura nacional, ofrecida por entidades públicas como La Notaria y La Registraduria Nacional: entes competentes para emitir documentos tan imprescindibles en la vida de niños y niñas, y posteriormente llevados a una cultura institucional dada desde la participación democrática en los procesos de elección de representantes estudiantiles, ejerciendo un derecho que solo se da a partir de un documento de carácter nacional y obligatorio para mayores de 18 años llamado “Cédula de Ciudadanía” y ellos como estudiantes menores de edad lo ejercieron desde su “Cibercédula estudiantil”, siguiendo las normativas protocolarias que debe realizar todo ciudadano con antelación para emitir un voto. Los niños y niñas siendo cada uno de ellos conocedores de las propuestas a elegir y por ende autónomos al depositar un voto ejecutaron todo este proceso normativo, vivenciando una experiencia de una acción de la vida diaria.

Las actividades anteriores tienen como referente, fomentar la capacidad de asombro, la curiosidad, el sentido de pertenencia que conlleve a formar niñas y niños críticos, reflexivos y autónomos en la toma de decisiones que involucren directamente su cotidianidad.

Cabe resaltar, que esta estrategia guiada a partir de las actividades mencionadas anteriormente, evidenciaron dificultades a razón del poco compromiso de algunos padres de familia, en la entrega oportuno de ciertos documentos como:

el registro civil de nacimiento, certificado del tipo de sangre y dos fotos respectivamente, para hacer el diligenciamiento de la Tarjeta de Identidad en la ejecución de la actividad “En los zapatos de mi registrador”, puesto que no todos los niños y niñas la pudieron obtener, lo cual no fue un obstáculo para desarrollarla, porque primo la motivación, la pasión, el compromiso y la responsabilidad que conllevó a un desenlace satisfactorio.

Finalmente, esta estrategia pedagógica sin duda alguna ha llenado las expectativas de la comunidad educativa, docentes, estudiantes, padres de familia y comunidad en general, al impartir conciencia de la importancia de la pluralidad y la valoración de diferencias, desde la comprensión y el sentido a acciones en pro de la permanente búsqueda de identidad en el contexto socio-cultural sanjuanero, dando pasos dirigidos a la convivencia ciudadana  enmarcada desde los valores, deberes y derechos practicados en un contexto cercano a ellos: casa, escuela, salón de clases, etc.

“Las experiencias vivenciales escolares no es más que el espejo cercano a la realidad, pues permite experimentar hechos de la cotidianidad desde contenidos extracurriculares.”